La señora presidente a la unidad nos convoca y así se llena la boca con la hermandad de la gente. En la calle no se siente la paz reconciliadora y se teme que a la hora se repartan más balazos. Congreso, ¿oyes los pasos o el dinero te demora?
Ardes, sed. ¡Ra!
La señora presidente a la unidad nos convoca y así se llena la boca con la hermandad de la gente. En la calle no se siente la paz reconciliadora y se teme que a la hora se repartan más balazos. Congreso, ¿oyes los pasos o el dinero te demora?